El golf no es sólo uno de los mayores activos económicos para el sector turístico de La Costa del Sol y del resto de Andalucía, el golf se ha convertido en un producto sostenible y una manera estupenda de practicar mindfulness, ayudándonos a conseguir beneficios para nuestra salud, desconectando del estrés, para conectarnos con nosotros y la naturaleza.
Hace unos días, escuché a nuestro Ministro de Comercio, el Señor Alberto Garzón (coordinador de IU), casualmente malagueño, despotricar de nuestro sector turístico, criticando lo que él entiende como un sector de “bajo valor añadido y precariedad”. No trato de dar una respuesta política, ya que no lo soy, ni falta que me hace, sólo pretendo hacer una reflexión que ayude a superar los prejuicios y estereotipos que del golf existen, sumando nuevos usos, de los que la sociedad puede beneficiarse, de la práctica del golf y el mindfulness. El golfulness.
El turismo como dinamizador económico y creador de empleo
El turismo es la industria que ha tirado del carro en la generación de empleo, desde la última crisis de la deuda, especialmente en La Costa del Sol y en el resto de Andalucía, que lejos de tratarse de un sector con bajo valor añadido, ha conseguido ser el que mayor valor aporta al PIB español, el que más y de más calidad empleo genera, el sector que más inversiones atrae y el sector que mejor posiciona la marca España, fuera de nuestras fronteras, siendo hasta antes del inicio de la pandemia por el COVID-19, el país más visitado del mundo.
Sólo en la Costa del Sol, el turismo volvió a batir récord en 2019, aportando a la economía de la provincia de Málaga 14.400 millones de euros, el 14% del PIB, por casi 13.400 empresas dan vida a esta industria en la provincia. El mayor dinamizador de empleo en Costa del Sol, dando trabajo de forma directa a 173.795 familias. Durante el 2019, nuestro destino superó por primera vez la barrera de atraer a más de 13 millones de turistas, con más de 26,3 millones de pernoctaciones, sin computar las realizadas en las viviendas turísticas. Estos viajeros valoraron sus estancias con un alto nivel de satisfacción, otorgando a nuestro destino una nota de 8,87 sobre 10.
¿Acaso esto se podría haber conseguir, por un sector de “bajo valor añadido y precario”?
El golf, motor económico y de empleo en la Costa del Sol
El turismo de golf atrae cada año en Andalucía a más de 500.000 visitantes caracterizados por su alto poder adquisitivo. El golf se ha convertido en una de las principales herramientas para la industria turística, atrayendo a viajeros con alto poder adquisitivo, con un impacto económico de más de 2.000 millones de euros, en los márgenes de la Costa del Sol, desde Vélez Málaga hasta San Roque, disponemos de 56 campos que aportan un alto valor añadido a la oferta turística, especialmente fuera de temporada, ayudando a combatir la estacionalidad.
El golf genera en nuestro destino más de 17.700 puestos de trabajo, aportando un valor incalculable a otros segmentos de la industria turística: agencias, hoteles, restaurantes y chiringuitos, comercios, transporte, etc… La aportación del golf a la sociedad andaluza en general y en la Costa del Sol en particular, es de un valor incalculable. No olvidar que en la Costa del Sol ha sido reconocida como mejor destino de golf europeo 2019, por la International Association of Golf Tour Operators (IAGTO).
¿Acaso este hito se hubiese podido conseguir a través de un sector con bajo valor añadido y precario?
Producto sostenible
Pero no sólo somos los líderes entre los destinos turísticos de golf en Europa, sino que también encabezamos el ranking de destinos más respetuosos con el medio ambiente, gracias al sistema de riego de los campos de golf de la Costa del Sol, a través de agua regenerada.
La Costa del Sol Occidental compuesta por 11 municipios: Benahavís, Benalmádena, Casares, Estepona, Fuengirola, Istán, Manilva, Mijas, Marbella, Ojén y Torremolinos, es la zona de Europa más respetuosa con el medio ambiente, golfisticamente hablando, gracias al tratamiento de aguas tóxicas, para regenerarlas y distribuirlas por alrededor de 40 campos de golf de la Costa del Sol.
Los campos de golf de la Costa del Sol ya lucen un sello de calidad que les acredita por su gestión sostenible con agua regenerada. Se calcula que cada año se emplean alrededor de seis millones de metros cúbicos de agua reciclada para regar los campos de golf de la Costa del Sol.
Una herramienta para desconectar durante tus próximas vacaciones
El segmento de viajes para desconectar del estrés y volver a conectar con uno mismo y la naturaleza, no para de crecer. Los viajes conocidos como conscientes o Mindful Travel que sustituyen al antiguo wellness, son una alternativa para el nuevo viajero de lujo, que busca desconectar durante sus próximas vacaciones, a través de alojamientos sostenibles, en contacto con la naturaleza y experiencias de calidad que le conecten, de forma sincera, con el estilo de vida local.
El golf se puede convertir en una manera estupenda de practicar mindfulness, a través del Golfulness, un nuevo concepto creado por Mindful Travel con estilo andaluz, que te ayudará a jugar enfocado “en conciencia plena”, para mejorar tu salud y bajar el hándicap. El simple gesto de una meditación específica, 10 minutos antes de comenzar la vuelta, te dará grandes resultados a corto plazo.
El golf es un juego que implica la coordinación de 124 músculos, aproximadamente un 25% de los que poseemos, en un swing que dura apenas décimas de segundos y que puede alcanzar velocidades de más de 100 km/hora. Además de coordinar el uso de 14 diferentes palos, dependiendo de la posición de la pelota, la distancia y el vuelo que necesitemos alcanzar, leer las caídas de los Green, evitar las trampas de arena y agua. Además de ser un deporte totalmente individual, depende todo de nosotros, porque la pelota está estática, esperando que nosotros la golpeemos. Entonces resulta muy importante conectarse con nuestros sentidos y liberar la mente de todo aquello que pueda obstaculizar una buena ejecución, estando así concentrado y enfocado para poder lograr nuestros objetivos y disfrutar el juego.
Un encuentro con la naturaleza
Además, la caminata consciente que supone jugar al golf (6 km aprox), lo convierte en una de las actividades más mindfulness, disfrutando de la belleza natural del paisaje de los campos, el olor del césped recién cortado, la brisa, la fauna, los rayos del sol, que nos ayudan a obtener más vitamina D, que está ampliamente vinculado con el bienestar, es por ello que el golf necesita el mindfulness y además lo propicia.
De hecho entrenadores y deportistas (como Tiger Woods o Rory Mcllroy) vinculan en alto grado el resultado deportivo con factores psicológicos. Mcllroy después de ganar por 8 golpes el US Open en el 2011 atribuyó su éxito a la importancia de “estar en el momento”.
Así que la próxima vez que salgáis a jugar, aprovechad para practicar golfulness, os ayudará a mejorar el juego y os creará bienestar emocional, además del físico. La concentración en “el aquí y el ahora” no es algo que se logra de la noche a la mañana, pero si lo haces de manera disciplinada te aseguro que no solo mejoraras tu hándicap sino también tu calidad de vida. Y cada día querrás jugar más golf, un juego que para los que lo conocemos es simplemente adictivo.